PROS y CONTRAS de casarse un viernes

Cuando una pareja comienza a planear su boda, una de las primeras decisiones que deben tomar es la elección de la fecha.

Los sábados siguen siendo el día más popular, pero a raíz del Covid, donde hubo una acumulación de bodas que habían tenido que ser pospuestas, sumadas a las bodas del año en curso, los novios se vieron obligados a contemplar los viernes como fecha definitiva para su gran día. A día de hoy, esta iniciativa cada vez está tomando más fuerza, y ya son muchas las parejas e invitados que prefieren celebrar una boda un viernes antes que un sábado.

Sin embargo, esta elección tiene tanto ventajas como desventajas, y es importante considerarlas antes de tomar una decisión final.

Hoy analizaremos a fondo los pros y contras de casarse un viernes, para que puedas evaluar si es la mejor opción para vosotros.

VENTAJAS:

• Mayor disponibilidad de proveedores y locaciones

  
  

Una de las principales razones por las que muchas parejas eligen casarse un viernes es que las locaciones y proveedores suelen tener más disponibilidad en comparación con los sábados, que son los días más demandados. Esto significa que puedes tener más opciones para elegir la iglesia, la finca, el fotógrafo o el DJ de tus sueños.

Si tienes en mente un lugar o proveedor específico que siempre está reservado los fines de semana, casarte un viernes podría asegurar que estén disponibles para ti.

• Precios más bajos

  
  

Los costes de casarse en un viernes suelen ser considerablemente más bajos que los de un sábado. Muchos lugares y proveedores ofrecen descuentos significativos para bodas en días laborales, ya que la demanda es menor.

Este ahorro puede liberarte presupuesto para invertir en otros aspectos importantes de la boda, como la decoración, la luna de miel, o incluso en aumentar la lista de invitados.

• Menores requisitos de contratación

Si estás planeando tu boda en la finca de tus sueños pero tienes en mente una fecha muy demandada, es probable que te pongan condiciones de contratación más exigentes, como por ejemplo, un número mínimo de invitados. En muchas fincas ya se están solicitando por encima de los 200 invitados en algunos sábados del año. Si decides realizar tu boda un viernes, es altamente probable que este mínimo requerido disminuya considerablemente, lo cual te facilitará la búsqueda del espacio perfecto sin condicionarte a tener que invitar a más gente.

• Fin de semana largo para disfrutar

Muchos invitados prefieren acudir a bodas los viernes ya que les deja libre gran parte del fin de semana: sábado para descansar y recuperarse de la gran fiesta y todo el domingo para hacer otros planes que no sean estar tirado en la cama reponiendo fuerzas antes de enfrentarse a otra larga semana de trabajo.

Además, al casarte un viernes, tú y tus invitados podéis disfrutar de todo el fin de semana para seguir celebrando si quedan fuerzas y ganas. La boda no termina cuando termina la fiesta. Puedes aprovechar el resto del fin de semana para disfrutar con familiares y amigos que hayan viajado, o para relajarte antes de partir a la luna de miel.

DESVENTAJAS:

• Dificultades para que los invitados asistan

Uno de los mayores inconvenientes de casarse un viernes es que puede ser difícil para algunos invitados asistir, especialmente si tienen compromisos laborales o viven lejos. Si bien algunos estarán encantados de tomarse el día libre para asistir a tu boda, otros podrían no tener esa flexibilidad.

• Posible cansancio de los invitados

  
  

Para aquellos que trabajan de lunes a viernes, llegar a una boda al final de la semana laboral puede ser cansado. Los invitados pueden estar menos enérgicos o más agotados, lo que podría afectar el ambiente general de la celebración, especialmente si se trata de una boda nocturna.

CÓMO SOLUCIONAR LOS CONTRAS:

Si decides casarte un viernes, aquí te dejo algunos consejos prácticos para asegurarte de que todo salga perfecto:

• 1. Notifica a tus invitados con anticipación: Avisa con suficiente antelación para que puedan hacer los arreglos necesarios en sus agendas laborales. Envíales una save-the-date lo antes posible para que puedan pedir el día libre en el trabajo si es necesario.

  
  

• Intenta empezar la ceremonia a una hora no muy temprana. Tendrás que darle margen de tiempo a aquellos que no han podido tener el día libre en el trabajo para que se arreglen y descansen un poco.

  
  

• Busca un lugar donde puedas realizar la ceremonia y la celebración en el mismo lugar Si no es posible, al menos trata de que las distancias entre sí estén lo más próximas posibles. De esta forma, amortizaréis mucho más el tiempo real de la celebración. Plantéate hacer una boda más reducida en cuanto a tiempo. No hace falta poner 6 horas de barra libre. Cada vez se estila más hacer bodas más cortas (4 horas de barra libre) pero cuidando mucho la calidad de entretenimiento de ese tiempo.

  
  

• Ofrece transporte o facilidades de alojamiento: Si tienes muchos invitados que vienen de fuera o que viven lejos, considera proporcionar transporte o sugerir opciones de hospedaje cercanas para que sea más fácil para ellos asistir y disfrutar de la fiesta.

  
  

En definitiva, no subestimes la idea de casarte un viernes por el mero hecho de que no sea lo convencional. El mundo de las bodas está evolucionando mucho, y cada vez es más habitual y ventajoso realizar este tipo de celebraciones los viernes.

Si aún no estás segura de si un viernes es el mejor día para tu boda, contáctame y estaré encantada de ayudarte a evaluar todas las opciones y planear el día perfecto. ¡Tu boda debe ser todo lo que sueñas, sin importar qué día la celebres!